Seamos honestos; el ciberespionaje es una realidad. Más allá de todas las películas o series que pueda ver, siempre hay datos reales aplicados en la ficción. Así como China es acusada por ser la mejor ciberpotencia en espionaje digital, también USA aplica sus conocimientos.
De hecho, «Eagle», un hacker patriótico chino, conversó con periodistas de investigación de RTVE y expresó que «de forma clandestina, el gobierno de Estados Unidos también recurre al hackeo». Mientras, por su parte, China tiene un claro objetivo de sustituir a Estados Unidos como la primera superpotencia.
Cuando se trata de esta lucha por el primer lugar en ser la superpotencia, se estima que todo comenzó en el 2001, cuando China Eagle Union solicitó a otros hackers de China unirse a ellos para atacar la Armada de Estados Unidos. Considerando que «la batalla por la supremacía mundial” comenzaba.
¿Qué es el ciberespionaje y cómo funciona?
El ciberespionaje tiene ciertos puntos:
- Es secreto, por lo que hay gran falta de información en el tema
- Afecta las relaciones económicas y políticas entre estados-nación
- Es un problema importante e intrigante entre todas las naciones
- Se hace muy complicado (incluso para los organismos gubernamentales) conocer detalles como el qué, quién o por qué
La definición más acertada del ciberespionaje fue expuesta en el Manual de Tallin, un estudio académico patrocinado por el Centro de Excelencia en Defensa Cibernética Cooperativa (CCDCOE) de la OTAN en 2009, pero publicado en 2013. (Cuenta con 200 reglas o pautas que establecen cómo se puede aplicar el derecho internacional a una guerra cibernética).
Definen el ciberespionaje como: «un acto emprendido clandestinamente o bajo falsas pretensiones que utiliza capacidades cibernéticas para recopilar (o intentar recopilar) información con la intención de comunicarla a la parte contraria».
Un ataque de ciberespionaje puede utilizar herramientas como:
- Ataques con ransomware
- Robo de IP
- Ataques DDoS
- Malware
- Bombas lógicas
- Backdoor
- Spyware o programas de espías
Sin embargo, la modernidad va dando mayores formas de realizar ataques de este tipo. Hasta ahora, Estados Unidos, Rusia y China son considerados como los espías cibernéticos más avanzados y prolíficos.
Entre 2015 y 2018, se registraron miles de robos de documentos diplomáticos del sistema de mensajería diplomática de la Unión Europea, y las investigaciones con informantes anónimos dieron con una empresa china como la responsable de tales actos.
Las potencias mundiales creen que se defienden con el ciberespionaje
Así como estas potencias están protegiendo sus sistemas, también se conoce (o, por sentido común, también se asume) son los autores de otros ataques de ciberespionaje. Por su parte, Intel han identificado cinco áreas clave que deben proteger los expertos en ciberseguridad:
- Detección de amenazas e inteligencia de amenazas
- Seguridad de datos y aplicaciones
- Administración de identidades de acceso
- Seguridad de redes
- Seguridad de host y sistemas
Nuevamente, los periodistas de RTVE consiguieron, por medio de Wikileaks, referencias a los primeros ciberataques patrocinados por la administración china y documentados por Estados Unidos. El exfiscal general adjunto de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Carlin, recordaba: «Robaban el producto de la investigación y el desarrollo, la propiedad intelectual, las estrategias de negociación de la empresa… y veíamos cómo la información salía de Estados Unidos en dirección a China».
Y, aunque siempre resaltan los mismos tres países, hemos compartido anteriormente los países con mayor desarrollo en ciberseguridad, donde destacan unos 25, cada uno consiguiendo su sitio en un escenario digital, donde eventualmente todos tendrán más presencia. Pero, queda claro que el puesto como la potencia o ciberpotencia sólo la puede llevar uno.
Es por este motivo que las guerras comienzan a moverse a otros sitios. Si sumamos, además, situaciones de tratados por la paz, alto de armas y temas similares, continuarán los conflictos de otras formas, donde el ciberespionaje o ciberguerras estarán en el ciberpespacio (una verdadera potencia necesita tener el dominio en muchos lugares: espacios terrestres, espaciales, y también digitales).
Son muchos los factores que pueden llevar al ciberespionaje; por ejemplo, sería «más sencillo» ejecutarlo para conocer secretos de Estado, ya que todos los gobiernos del mundo utilizan el internet para almacenar información. Sea por motivos lógicos o razones que sólo las naciones y sus políticas privadas decidan, todos, de alguna forma, emplearían el ciberespionaje. Con mayor énfasis, ahora se ven los síntomas de que el ciberespionaje es un hecho.
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