Con toda una edición de CyberWar Magazine dedicada al metaverso, cerramos el tema por este mes pensando y haciendo la pregunta “¿realmente estamos listos para el metaverso?”
Henrique Villanueva, uno de los presentadores en El Opinador TV, comenta que dentro de 5 años será posible ver el metaverso en todo su esplendor, lo que incluye experiencias inmersivas: reuniones con amigos, visitar ciudades, ir de compras, conciertos, juegos, películas, reuniones de trabajo, entre otros. Una vivencia por medio de un avatar.
Si más compañías se siguen uniendo a la idea de los metaversos, continuarán creciendo las oportunidades de tener sitios para visitar por medio de este mundo virtual.
¿Puede la sociedad enfrentar los cambios que trae el metaverso?
Se han comentado los riesgos, las tecnologías, las empresas que están invirtiendo en este plan, así como los beneficios. Se está planteando un mundo interconectado con la vida real y la virtual. ¿Cómo se enfrentarían las responsabilidades diarias para quienes viven fuera de este mundo, con profesiones no tan digitalizadas, estudios y hasta cuidado de la familia?
Existen demasiadas dudas, pero se apuesta por la posibilidad de que el ser humano pueda adaptarse a esto. Si consideramos que, desde los 90 hasta los 2000, la evolución de la tecnología ha sido muy grande, muchos se han quedado con tecnologías pasadas, pero a otros, especialmente los que crecen en la era digital, se les hace más fácil la adaptación. El punto es que tomó menos de 40 años construir unas bases sólidas para una realidad virtual, así que en menos tiempo seguro podrán hacer grandes avances.
Expertos también han explicado los malestares que causan los lentes de realidad virtual, la sensación de desorientación y hasta dificultad en vislumbrar la línea entre lo real o ficticio (especialmente los minutos posteriores de haber estado en el mundo virtual). ¿Cómo, entonces, estos momentos de conexión en el metaverso pueden afectar la salud (a corto plazo) de los usuarios?
Aunque hemos mencionado en Las tecnologías del metaverso y sus usos, que todavía falta para que terminen de desarrollar las formas de ingreso al metaverso, esto atrasaría un poco el masivo acceso, sin contar cuánto serían los costos y las posibilidades que tengan las personas a lo largo y ancho del mundo.
El metaverso no es el único cambio tecnológico que enfrentamos
José Cánovas, de TSE Technology, habló sobre el metaverso como lugar, producto o servicio, momento o mundo espejo, detallando que “la manera de acceder al metaverso debe ser lo más inmersiva posible, lo más sensitiva posible a nivel de experiencia, dado que este debería ser una representación del mundo real en digital. Las tecnologías más comunes detrás de esa inmersión son la Realidad virtual, la Realidad aumentada y la Realidad mixta, las cuales se nutrirán de elementos hápticos y otros sistemas para conseguir ese realismo que se espera del metaverso”.
También se ha escuchado que muchos de los sectores más beneficiados por estas tecnologías serían la salud y medicina, con avances posibles para crear soluciones y hasta curas a millones de cuadros clínicos. Y, finalmente, sumando todo lo que hemos enunciado en esta publicación, el trabajo, los estudios y la vida misma cambiaría para muchos.
Haciendo eco a la opinión de Cánovas: “El metaverso va a tener cabida en prácticamente todos los sectores, dado que es la representación del mundo real tal y como lo conocemos actualmente”.
Sin embargo, existen muchas teorías con respecto a si estamos listos para el metaverso (o no); sólo se podrá comprobar cuando comiencen a ejecutar los metaversos de acuerdo al éxito que tengan.
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